La bandera a cuadros hondeaba, estaba terminando de ponerme el traje, el casco y los guantes. Al mismo tiempo los participantes de la categoría Shifter entraban uno a uno al pit lane. Cuando ingreso el ultimo, los mecánicos de Reynard se acercaban con uno de los autos de la Copa Masters; era mi turno de salir a la pista. Me subí al kart, me indicaron que daría 5 vueltas, y que cuidara el auto.
Uno de los mecánicos encendió el motor, y unos segundos después entre al circuito. El escenario no podía ser mejor; el Kartodromo Oscar Casillas. Una pista la cual conozco muy bien, de vista... 1200 metros de recorrido por vuelta, y sus curvas no son para cualquiera (bueno, para un inexperto como yo, si es complicado).
En la vuelta de calentamiento hubo 3 cosas que me preocuparon: La aceleración, el frenado y la dirección. Sobre todo el frenado, ya que se realiza con el pie izquierdo, y digamos que la única función que hace mi pie izquierdo es accionar el pedal del clutch lo mas rápido posible, con lo cual no me debía confiar en ningún momento.
El tema de la dirección se aclaro pronto: poco giro del volante, pero suficiente para mover mucho el auto, y la aceleración era inmediata.
Termine mi reconocimiento de la pista, entrando en la recta principal tuve la grandiosa idea de acelerar a fondo, antes de entrar a la curva 1, pise demás el freno, provocando que las llantas se bloquearan y derrapara, por fortuna no le paso nada al auto.
-Eso no lo tenia en mente. -Dije, retome el sentido de la pista y seguí avanzando. De momento esa acción me causo mucha gracia, era de esperarse de un novato.
Llegue a la recta posterior... Ahora si, a fondo! El sonido de ese motor me dejo cautivado, a pesar de ser pequeño.
Entre a la zona que considero mas complicada de la pista: 4 curvas que anteceden a la recta principal, y como no quería meterme en problemas decidí ir tranquilo.
Evidentemente mi ritmo era muy, muy, muy lento en comparación con, no se, creo que con los babys...
Mi nueva preocupación era no entorpecer el programa, ya que los pilotos de Reto Telmex se estaban alistando, así que trate de rodar un poquito mas rápido. Total, con forme pasaban las vueltas entraba en confianza con el kart y con la pista, ya no era una frenada tan larga y aceleraba ligeramente en las curvas.
En mi 5ta y ultima vuelta... volvió a pasar; otro derrape antes de la curva 1.
-Es enserio? -Dije. Volví a retomar el sentido del circuito y por si las dudas me fui despacio. Tenia que recorrer una buena distancia para regresar al pit lane, distancia que aproveche para ir reflexionando un poco sobre lo que pasa por la cabeza de un piloto: trazada ideal, frenado, aceleración, giro del volante, procesar la información que les da el equipo, rebasar, defender posición, etc, etc, etc. En mi caso, los derrapes que protagonice fueron esperados y divertidos. Para un piloto, un derrape es uno de los errores mas graves y que no puede cometer; La frustración y la desesperación lo comienzan a invadir, porque sabe que todo el trabajo que hizo se fue por un tubo...
Al final llegue al pit lane. Momento de entregar ese Reynard. Me baje y comencé a cambiarme. Esta experiencia me dejo con una gran sonrisa, y reafirmo mi admiración por las y los pilotos.
Termine mi reconocimiento de la pista, entrando en la recta principal tuve la grandiosa idea de acelerar a fondo, antes de entrar a la curva 1, pise demás el freno, provocando que las llantas se bloquearan y derrapara, por fortuna no le paso nada al auto.
-Eso no lo tenia en mente. -Dije, retome el sentido de la pista y seguí avanzando. De momento esa acción me causo mucha gracia, era de esperarse de un novato.
Llegue a la recta posterior... Ahora si, a fondo! El sonido de ese motor me dejo cautivado, a pesar de ser pequeño.
Entre a la zona que considero mas complicada de la pista: 4 curvas que anteceden a la recta principal, y como no quería meterme en problemas decidí ir tranquilo.
Evidentemente mi ritmo era muy, muy, muy lento en comparación con, no se, creo que con los babys...
Mi nueva preocupación era no entorpecer el programa, ya que los pilotos de Reto Telmex se estaban alistando, así que trate de rodar un poquito mas rápido. Total, con forme pasaban las vueltas entraba en confianza con el kart y con la pista, ya no era una frenada tan larga y aceleraba ligeramente en las curvas.
En mi 5ta y ultima vuelta... volvió a pasar; otro derrape antes de la curva 1.
-Es enserio? -Dije. Volví a retomar el sentido del circuito y por si las dudas me fui despacio. Tenia que recorrer una buena distancia para regresar al pit lane, distancia que aproveche para ir reflexionando un poco sobre lo que pasa por la cabeza de un piloto: trazada ideal, frenado, aceleración, giro del volante, procesar la información que les da el equipo, rebasar, defender posición, etc, etc, etc. En mi caso, los derrapes que protagonice fueron esperados y divertidos. Para un piloto, un derrape es uno de los errores mas graves y que no puede cometer; La frustración y la desesperación lo comienzan a invadir, porque sabe que todo el trabajo que hizo se fue por un tubo...
Al final llegue al pit lane. Momento de entregar ese Reynard. Me baje y comencé a cambiarme. Esta experiencia me dejo con una gran sonrisa, y reafirmo mi admiración por las y los pilotos.
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